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Los océanos pueden marcar el destino del planeta

La contaminación y el calentamiento global han afectado a los mares. Urgen acciones para mejorar




El calentamiento global tendrá efectos irreversibles sobre las comunidades costeras, modificando la geografía y desapareciendo a muchos organismos | Foto: Ciencia Viva

Sumergirse en las profundidades del mar es una de las experiencias que muchos describen como sublime. Significa adentrarse en un mundo nuevo, desconocido para la mayoría e inquietante, pero a la vez generador de una paz superior que no todos atinan a describir. Sin embargo, efectos como la contaminación y el calentamiento global están haciendo que el paisaje y las características de ese escenario natural estén cambiando de manera dramática.

Para Adriana Ramírez Mendoza, una arquitecta bogotana que desde hace 6 años se dejó seducir por los misterios del océano y en noviembre ya va a cumplir 5 años como instructora de buceo, el panorama es lamentablemente desalentador por la afectación de la calidad del agua a nivel mundial, de la vida marina y la extinción acelerada de los corales debido, entre otras causas, al cambio en la temperatura del agua.

En esa misma línea, Benjamín Quesada, Ph. D. y profesor en Ciencias del Sistema Tierra de la facultad de Ciencias Naturales y Matemáticas de la Universidad del Rosario, coautor del reporte ‘Ipbes Global Assessment’, sostiene que los océanos son indispensables a nuestras vidas. En particular, porque son importantes fuentes de comida y empleo, ya que se estima que la pesca de captura marina y de agua dulce y la acuicultura proporcionan a 4.300 millones de personas alrededor del 15 por ciento de su proteína animal.

Además, asegura que son el pulmón del planeta (proveen un 70 por ciento del oxígeno necesario para los humanos), contienen 97 por ciento del agua del mundo y absorben el 30 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero, al tiempo que albergarían unas 300.000 especies diferentes. De ahí la preocupación de los expertos por todo lo que les está sucediendo. Quesada corrobora que los océanos se calientan cada vez más, pierden oxígeno, se acidifican, suben su nivel y están contaminados.
Por ejemplo, la contaminación por fertilizantes, derrames de hidrocarburos y plásticos (esta última se multiplicó por 10 en menos de 40 años), ha producido más de 400 ‘zonas muertas’ (zonas con muy bajo oxígeno para la vida), sumando un total de 245.000 kilómetros cuadrados (igual a la superficie conjunta de Amazonas, Vaupés y Caquetá), dice el docente.

Asimismo, llama la atención en el sentido de que fuera de las áreas más remotas del Pacífico y de los polos, prácticamente no queda ningún océano que albergue niveles naturalmente altos de fauna marina.

Algunos impactos

Por su parte, Federico Maldonado Uribe, Ph. D. y docente de ecosistemas marinos y zoología de invertebrados marinos del programa de Biología de la Universidad El Bosque, asegura que aún no es claro cuáles serán a ciencia cierta la transformación e impactos del calentamiento global en los océanos, pero que lo que sí es cierto es que dejarán de existir tal como los conocemos. 

Concuerda con que los cambios más evidentes son la acidificación y el incremento del nivel del mar. El primero de estos, afirma, tiene un impacto muy importante sobre los organismos que habitan los océanos, como lo son algunos integrantes del plancton, o sobre los arrecifes coralinos, en cualquiera de estos ecosistemas.
Un cambio en el balance puede ser incierto sobre todas las comunidades restantes, ya que del plancton dependen la gran mayoría de los organismos del océano, y en los arrecifes coralinos se estima en un 25 por ciento de las especies marinas, añade Maldonado.
En el segundo caso, considera que tendrá unos efectos irreversibles sobre las comunidades costeras, modificando la geografía y desapareciendo a muchos organismos costeros, entre estos los humanos (se estima que el 80 por ciento de la población mundial vive a 100 kilómetros de la costa).


Fuente: El Tiempo




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