Árboles luminosos para sustituir las farolas en las calles
Un grupo de científicos buscan reemplazar la iluminación eléctrica por un sistema basado en la ingeniería genética y la biotecnología.
La comunidad científica se acerca cada vez más hacia la bioluminiscencia, recurso evolutivo presente en bacterias, hongos, protistas unicelulares, celentéreos, gusanos, moluscos, cefalópodos, crustáceos, insectos, equinodermos y peces. El principal atractivo de este fenómeno es la capacidad de producir luz sin gasto de calor, el cual se entiende a menudo como una pérdida innecesaria de energía.
En 2010, investigadores de la universidad Stony Brook modificaron genéticamente una planta de tabaco al transplantarle algunos genes de una bacteria marina productora de luciferina.
Lo novedoso en el proyecto que lidera Antony Evans, fundador de Glowing Plants, es que diseñan las secuencias de ADN en un ordenador con un software especial, y después lo imprimen para inyectarlo con una pistola de genes que está a la venta para cualquier persona.
Además, como tienen un código abierto de ADN, puedes hacer tus propias modificaciones. Evans y sus socios afirman que su proyecto es la solución a un mundo que consume energía eléctrica desmedidamente y que tiene como consecuencia el cambio climático.
Evans confía en que sus plantas podrán, en pocos años, servir para iluminar las calles de las ciudades.