Aspectos interesantes de la ley 1374 de 2010

PARTE 1

Mediante la Ley 1374 promulgada el 8 de Enero de 2010, nuestro legislador dispuso los elementos para la creación, integración, funcionamiento, organización y financiación del Consejo Nacional de Bioética “como organismo asesor y consultivo del Gobierno Nacional, quien propenderá por establecer un diálogo interdisciplinario para formular, articular y resolver los dilemas que plantea la investigación y la intervención sobre la vida, la salud y el medio ambiente, así como la construcción e implementación de políticas en los asuntos referentes a la Bioética.” ; con dicha definición, pareciese que dicho organismo no sería más que el escenario propicio para la discusión de la bioética en Colombia (un tema tan escabroso como actual, máxime cuando se han firmado dos tratados de libre comercio en los cuales se ha apostado nuestra política económica, conciencia ecológica y seguridad jurídica). Hablar de un tema que va de la mano con los recientes “procesos de modernización y reconversión” económica, sin que los adalides de la nueva económicapseudomistificada nos califiquen de reticentes al cambio, es por demás una tarea titánica; no obstante lo anterior, procuraremos ser fiel a nuestra política y convicciones de objetividad, AÚN cuando se habla de bioética en medio de una extrema pobreza, falta de educación, seguridad social y salud y una evidente carencia de servicios esenciales en nuestro país (cuestión que no puede ser callada, ni siquiera ante el grito de batalla de ¡viva la globalización¡, ¡abajo los comunistoides ¡, que pareciese desprenderse del discurso pletórico de aquellos acérrimos defensores de los TLC).

Retomando nuestro punto de partida, mediante una ley de escasos siete (7) artículos, nuestro legislador plantea la creación de un Consejo Nacional de Bioética, colocando como sus principios fundamentales los siguientes:

La prevalencia, indivisibilidad y la inviolabilidad de los derechos humanos y de las garantías fundamentales, según lo contemplado en la Constitución Política y en los acuerdos internacionales firmados por el país.
La valoración de la dignidad de la persona humana y el respeto por el pluralismo étnico, religioso, de género y cultural.
La búsqueda de la erradicación de la pobreza y de la marginación así como la reducción de las desigualdades sociales y regionales.
La promoción del bien general, sin perjuicios de origen, raza, sexo, género, color, credo, y edad.
La atención del derecho a un medioambiente equilibrado.
El carácter aconfesional del Estado Colombiano.

Tales principios cobrarían preponderancia suma, sino fuera por el hechonimio de que la mayoría de los ciudadanos de a pie no tiene la más mínima idea de con que, como y donde se come la bioética (y tal noción se ve más que perdida entre culebrones, realitys, VDC y demás bruma de desinformación de nuestra televisión), muy a pesar de que la misma se define como: “Estudio sistemático de la conducta humana en el ámbito de las ciencias de la vida y de la atención a la salud, examinando esta conducta a la luz de los valores y de los principios morales” (REICH, W, Enciclopedia of Bioethics, Revised edition vol 5 Nueva Cork: Mac-Millan; 1995

CONSULTADO EN: http://laesquinadeharkonnen.obolog.com/aspectos-interesantes-ley-1374-2010-i-550332